Con todos los avances tecnológicos que surgen hoy en día, es muy difícil centrar la atención en solo uno. Parece que nos queremos acercar más rápido al futuro que nos prometió la ciencia ficción.
Open AI desde ya hace un tiempo ha estado trabajando en un modelo de lenguaje que es capaz de programar, diseñar y hasta conversar sobre política y el futuro; crea predicciones con solo darle órdenes.
La manera en que funciona es predictora, ya que su funcionamiento sirve a través de predecir qué palabra sigue, según el estudio de datos previos en el mismo contexto. Así, nos da como respuestas posibilidades que extrañamente pueden ser muy acercadas a la realidad.
Todas las respuestas se van dando según toda la información con la que es entrenado el modelo (o sea, machine learning), simulando el comportamiento del cerebro (redes neuronales).
Pero lo interesante de esto es que al parecer se están creando tecnologías y más concretamente máquinas que poco a poco no solo sustituyen puestos sino que incluso podrían reemplazar todas las personas de un equipo de trabajo.
Lo curioso aquí es cuestionarse a qué nivel de singularidad tecnológica podremos llegar, creando cosas que desde la ignorancia o el conocimiento se conviertan en algo realmente revolucionario para el empleo, las industrias e incluso la humanidad.
Según el MIT Technology Review, “GPT-3 es el más poderoso modelo de lenguaje jamás creado.”
¿La inteligencia artificial podrá crear creatividad?
En esta carrera inconsciente de humanos contra máquinas estará esa cuestión de qué es lo que la tecnología no puede crear.
Hoy en día muchas artes disciplinas y materias ya están inmersas en herramientas tecnológicas. La música, la arquitectura, el diseño gráfico, el marketing y la publicidad cada vez tienen más influencia tecnológica, llegando a un punto tal que la tecnología se volvió una necesidad para tener éxito en un ecosistema actual.
Procesos, creación de canciones, algoritmos sociales, traductores e insights técnicamente son muchas cosas que ha facilitado la tecnología en el campo creativo. Pronto, el desarrollo se enfocará en replicar la “creación de arte” a través de máquinas y algoritmos.
Hoy en día se cuenta con la “creatividad computacional” que busca entender la creatividad humana, diseñando programas que puedan entenderla y explicarla.
A pesar de que GPT3 está más en el lado de programación, algunas de las tareas que ya puede realizar son:
– Programar código SQL correctamente
– Crear artículos dándole sólo el título
– Simular conversaciones entre varios personajes históricos
– Predicciones con base en variables
La creatividad es genialidad
A GPT-3 se le llama Inteligente y sarcástico pero ¿será creativo?; dicen que puede tener efectos impredecibles al resolver problemas; efectos que sin duda asisten y ayudan a la creatividad humana, teniendo el mismo impacto que el “Software as a service” inmersos en todas las industrias.
Por ahora, la creatividad necesita del talento humano. De la capacidad de inventar y crear que solo algunos cuantos tienen y solo unos más son verdaderamente capaces de explotar en todo su esplendor.