La importancia del storytelling es fundamental para generar un gran impacto, pero comencemos por el significado de la palabra storytelling, Story (historia) y telling (contar), la acción de contar historias, aplicada hace tiempo en el ámbito periodístico y por supuesto en todos los géneros literarios.
¿Pero cómo funciona el storytelling aplicado al mundo del marketing y el branding?
Pues básicamente funciona de la misma manera, como seres humanos todos los días estamos rodeados de historias que algunos tienen la habilidad de transmitir de una forma más emotiva y efectiva que otros hacia un público cautivo, con el objetivo de comunicar un mensaje y conectar con su audiencia, buscar esos puntos en donde se sientan identificados.
Actualmente, se presentan un universo de medios y formatos para hacer llegar nuestra historia, contarla es un trabajo de investigación y creatividad. La importancia del storytelling en las marcas surge con el fin de impactar a un nivel emocional y racional en el contexto donde todo es efímero y donde constantemente nos vemos bombardeados de información.
Humanizar a nuestro producto o servicio
Si tratamos a nuestra marca como una persona podemos definir que esta tiene valores, atributos, gustos, personalidad, forma de ser, existe algo que la hace diferente. Esto nos lleva a que la marca tiene una voz y una historia que contar.
Construir un concepto, ¿Qué queremos comunicar? ¿Cuál será el mensaje?
Necesitamos una idea que genere interés, el eje central para que se desarrolle la historia. Si la idea no es clara y concisa, nuestra audiencia jamás habrá entendido nuestro mensaje. Podemos partir de un concepto muy profundo si, pero que se proyecte de manera asequible.
Pero ¿quién es nuestra audiencia?
Si nuestra historia tiene la intención de conectar, pues nuestra audiencia estará buscando reírse, emocionarse; tenemos que conocerlos para saber qué forma o tono tendrá nuestro mensaje. Recuerda que al buscar empatizar con nuestro público estamos creando un vínculo sólido.
¿Cómo la contaremos?
Digamos que pasamos la parte de investigación y llegamos a la parte creativa. Es cuestión de sensibilidad, buscar inspirar a través de imágenes, sonidos, gráficos, etc aquí podemos dejar a un lado la parte de venta. Las plataformas están ahí para colocar nuestra historia, el contenido debe ser adaptable a los medios que más nos convengan.
Tengamos presente el valor de lo que somos, que una marca siempre estará conformada por personas que a su vez comparten las mismas emociones y situaciones que los que escuchan sus historias. Mientras más honestos seamos al momento de contarlas más fácil llegaremos a un público que se identifique con nosotros.